El documento describe las características principales de la arquitectura gótica, incluyendo su verticalidad, luminosidad y uso de vidrieras, y naturalismo en la decoración escultórica. El estilo gótico se desarrolló entre los siglos XII y XVI como un arte urbano y burgués que buscaba representar sensaciones celestiales a través de espacios interiores luminosos y altos, con énfasis en los vanos sobre los muros.